Lo grande y lo pequeño
El Museo Evaristo Valle de Gijón es un marco incomparable, puede sonar tópico, pero lo es y además se ha ganado el título a pulso. El problema es que ese marco se había ido quedando pequeño. El Espacio Bonsai, creado en 1994 para albergar la colección de Rolf Beyebach y empleado como recinto de actividades educativas, necesitaba una ampliación urgente.
Caja Rural de Asturias se ocupó en 2016 de ensanchar el espacio y adecuarlo a las dimensiones de la actual colección, además de poner al día su equipamiento. Ahora los visitantes del museo pueden admirar estas criaturas, resultado de un arte milenario: pináceas, enebros, olmos, un cedro del Líbano, el llamado «árbol fósil»…